Crecer.
1. intr. Dicho de un ser orgánico: Tomar aumento natural. Apl. a pers., se dice principalmente de la estatura.
Madurar.
5. intr. Adquirir pleno desarrollo físico e intelectual.
Nada me gustaría más que haber podido detener el transcurso del tiempo. Quedarme estática en aquel período en el que las camas solo eran para hundirme en el mundo de Morfeo; dónde los juguetes eran simples seres inmóviles que cobraban vida a través de la capacidad de imaginar de un niño, en vez de seres con vida a los que se manipula, y no reaccionan, inmóviles. Cuando salir por las noches no existía, cuando los besos eran para princesas y literatura, y no para la satisfacción personal momentánea. Que melancólico.
Ver como la sociedad "madura", y qué el hecho de alcanzar el pleno desarrollo físico e intelectual significa ser capaz de entender como reaccionar, que deber pensar, que es lo que se supone correcto para nuestra prosperidad como personas. Asimilar que solo somos ovejas. Madurar es pretender ser mejor que el otro, madurar es afianzarse en relaciones largas sin amor; porque madurar, también significa olvidar la utópica idea infantil de que el amor existe.
Es el hecho de aceptar que estamos destinados a una vida mediocre llena de palizas por parte de la propia vida, ya que este es el modo que tienen los intermediarios (encargados de proporcionárnoslas) de sanar su ira y saciar sus respectivas cicatrices. Solo somos una manada humana de venganza injusta, injustificada.
¿Y lo peor? Que no hay manera de pararlo. La madurez, al igual que el crecimiento, se adquiere progresivamente con el paso del tiempo. La primera es proporcionada por las influencias del mundo que nos rodea y por sus comportamientos, la otra, por nuestras (ya tan olvidadas) raíces biológicas.
Yo solo quiero crecer, y aunque esto aparenta ser la único "obligatorio" por leyes naturales, lo cierto es que el acto de madurar es incluso más imposible de parar que los mismas agujas del reloj.
"Nada me gustaría más que haber podido detener el transcurso del tiempo."
